¿Cómo evito lo inevitable?
Cuando nunca hago nada por hacer las cosas bien.
¿Cómo aplazo lo inaplazable?
Cuando nunca he llegado a tiempo a la meta.
¿Cómo escribo lo inteligible?
Cuando nunca he leído grandes obras literarias.
¿Cómo apendejo al sabio?
Cuando nunca he hecho caso a las palabras necias.
¿Cómo respondo lo que no he entendido?
Cuando nunca me he enamorado.
¿Cómo puedo ser escuchado?
Cuando nunca he abierto la boca en público.
¿Cómo comparto ideales?
Cuando nunca he seguido la moda establecida.
¿Cómo llamo a esto que he escrito?
Cuando ni yo sé qué diablos he escrito.
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